DOI 10.34019/1980-8518.2021.v21.38085
Revista Libertas, Juiz de Fora, v. 22, n.1, p. 289-301, jan. / jun. 2022 ISSN 1980-8518
La Federación Internacional de Trabajadores Sociales
(FITS) e los trabajadores sociales en el mundo
Entrevista com Silvana Martinez*
abril de 2022
ENTREVISTADORA:
Carina Berta Moljo**
Carina Berta Moljo - Querida Silvana: primero queríamos agradecerte por aceptar
esta entrevista, estamos muy honrados con la posibilidad de entrevistarte. Nos gustaría que
nos cuente que es la FITS, su historia y su configuración actual. ¿Quiénes son los países que
componen esta Federación?
Silvana Martinez - En primer lugar, quiero expresar que la agradecida en este caso soy
yo, por haber pensado en mí para esta hermosa entrevista y por darme el espacio y la
oportunidad de compartir la maravillosa experiencia que ha significado participar activamente,
exactamente hace una década, en el ámbito de la Federación Internacional de Trabajadores
Sociales. Considero una iniciativa muy importante por parte de ustedes, ya que nuestras
organizaciones profesionales forman parte de la historia del Trabajo Social y constituyen
espacios políticos-profesionales de resistencias y luchas por la jerarquización de la profesión y
la mejora de nuestras condiciones laborales, en el marco de la profundización del orden social
vigente: capitalista-patriarcal-colonial-moderno.
Respecto a la pregunta, me parece importante mencionar que la Federación
Internacional de Trabajadores Sociales (FITS), es una organización de alcance internacional
* Doctora em Trabajo Social, Profesora en la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Nacional de Mar del
Plata. Presidente de la FITS Federación Internacional de Trabajo Social. Autora de importantes artículos y libros
sobre el trabajo social.
** Professora titular da Faculdade de Serviço Social – UFJF. Doutora em Serviço Social; bolsista produtividade
CNPQ, Membro do Grupo de Pesquisa: Serviço Social, Movimentos Socais e Políticas Públicas, (UFJF).
---------- Entrevista ----------
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creada en 1956 en el marco de la 8ª Conferencia Internacional de Trabajo Social celebrada en
Munich, Alemania. Su sede está actualmente en Rheinfelden, Suiza y sus miembros son
organizaciones profesionales nacionales de trabajadores sociales de cada país que haya
solicitado y obtenido su incorporación a la misma. Inicialmente se conformó con 12
organizaciones profesionales de Australia, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Alemania,
Grecia, Italia, Países Bajos, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos. En el año 2006 cuando
cumple 50 años de existencia, tenía 80 organizaciones y actualmente cuenta con 144
organizaciones miembros de todos los continentes del mundo.
El antecedente de la FITS es el Secretariado Internacional Permanente de Trabajadores
Sociales cuya creación se acuerda en el marco de la 1ª Conferencia Internacional de Trabajo
Social que se lleva a cabo del 8 al 13 de Julio de 1928 en París. En este mismo evento también
se decide la creación de la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social y del Consejo
Internacional de Bienestar Social. En 1932 un total de 8 organizaciones de Bélgica,
Checoslovaquia, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Suecia, Suiza y Estados Unidos aprueban el
Estatuto del Secretariado. Si bien esta organización tuvo una trayectoria de 20 años entre 1928
y 1948, dejó de funcionar durante la 2ª Guerra Mundial entre 1939 y 1945. Inicialmente el
Secretariado funcionaba en Berlín, Alemania, pero en 1933 con la llegada de Adolf Hitler al
poder se ve obligada a trasladar su sede a Ginebra, Suiza, y luego a Praga, Checoslovaquia,
donde por la situación política del país deja de funcionar en 1948 (Dodds, I. y Johannesen, T.,
2006).
Según su Constitución (Estatuto) la FITS es una organización global que tiene por
misión la defensa de la justicia social, los derechos humanos y el desarrollo social a través de
planes, acciones, programas y la promoción de las mejores prácticas de Trabajo Social en un
marco de cooperación internacional. El gobierno de la FITS está conformado por: a) la
Asamblea General; b) el Comité Ejecutivo; c) el Presidente/a Global; d) el Vicepresidente
Global y e) el Tesorero Global. La administración de la FITS está a cargo de un Secretario
General. Además de esta estructura de gobierno y administración, la FITS cuenta con Comités
de Trabajo creados por Asamblea para temas específicos (Comité de Derechos Humanos,
Comité de Ética y Comité Indígena), con Delegados/as en organismos internacionales y
Responsables de acciones, programas o proyectos específicos (Agenda Global, Publicaciones,
entre otros).
La Asamblea General se celebra cada dos años y está conformada por todos los
miembros plenos en condiciones de votar. Elige al Presidente/a Global y al Tesorero Global con
mandatos por cuatro años, pudiendo ser reelegidos por un solo período. El Comité Ejecutivo
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está conformado por el Presidente Global, el Tesorero Global, el Presidente y Vicepresidente
de para cada una de las 5 regiones geográficas en que está dividida la FITS: África, Europa,
América del Norte, América Latina y El Caribe y Asia y Pacífico. Uno/a de los 5 Presidentes/as
regionales es elegido/a como Vicepresidente Global, con mandato por 4 años, pudiendo ser
reelecto por un período.
El Comité Ejecutivo, el/la Presidente/a Global, el/la Tesorero/a Global y el Secretario
General de la FITS se reúnen al menos una vez por año de manera presencial y, además,
mantienen reuniones periódicas de manera virtual, para el tratamiento de los temas de la agenda
de trabajo, la toma de decisiones y la organización de actividades en el marco de la constitución
y el reglamento de funcionamiento que rigen la vida institucional. Algunas de las acciones más
importantes que se vienen llevando a cabo son: a) Elaboración y difusión de documentos
políticos sobre pobreza, violencia de género, abuso sexual infantil, trabajo infantil, piso para la
protección social, acuerdos y tratados internacionales, refugiados e inmigrantes y otras
problemáticas sociales; b) Ejecución de la Agenda Global para el Trabajo Social y Desarrollo
Social; c) Celebración del Día Mundial de Trabajo Social; d) Apoyo a las organizaciones
miembros; e) Elaboración y difusión de pronunciamientos, entre otras actividades.
En el marco de estas acciones y otras actividades desarrolladas a nivel mundial, la FITS
mantiene contactos y se ha constituido en una importante instancia de consultas de organismos
internacionales: Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Consejo
Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC); Fondo de las Naciones Unidas para
la Infancia (UNICEF); Organización Internacional del Trabajo (OIT); Organización Mundial
de la Salud (OMS); Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR); Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos
(ACNUDH), entre otros.
CBM - Recordando un poco la historia de los encuentros internacionales hay dos que
nos vienen a la memoria, el de Estocolmo, que posibilitó la interlocución de América Latina
con el Trabajo Social Radical de Europa y el de Rio de Janeiro (2012) donde construimos
una propuesta global para la definición del Trabajo Social Internacional. ¿Cuál tu opinión
sobre estos encuentros? ¿Destacarías otros?
SM - Efectivamente para mí, esos dos eventos llevados a cabo en el 2012, constituyeron
un hito histórico para la profesión por varios motivos: En primer lugar, el Workshop organizado
por el CFESS y llevado a cabo en Río de Janeiro en marzo de 2012, fue muy importante en el
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marco del proceso de discusión que se venía dando en la Región de América Latina y El Caribe
de la FITS en torno a la necesidad de modificar Definición Mundial del Trabajo Social y
precisamente fue ese encuentro se generó para llevar una posición unificada en la Asamblea
Mundial de la FITS que se llevó a cabo en Julio de ese año en Estocolmo. El Workshop contó
con la presencia de Rory Truell, Secretario General de la FITS; Nicolei Paulsen, Presidente de
la Región Europa de la FITS; Laura Acotto, Presidenta de la Región América Latina y El Caribe
de FITS; Abye Tasse, en representación de la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo
Social; Lorena Molina Molina, Presidenta de la Asociación Latinoamericano de Enseñanza e
Investigación en Trabajo Social; Silvana Martínez, Presidenta de la Federación Argentina de
Asociaciones Profesionales de Servicio Social; Samya Ramos, Presidente del Consejo Federal
de Servicio Social de Brasil; Malvina Ponce de León, representante del Consejo Nacional de
Trabajadores Sociales de Chile; Analía Fresco, representante de la Asociación de Profesionales
de Servicio Social o Trabajo Social del Paraguay; Esterla Barreto, representante de la
Asociación Nacional de Escuelas de Puerto Rico; Rodolfo Martínez, Presidente de la
Asociación de Asistentes Sociales de Uruguay y representantes de la Asociación Dominicana
de Profesionales de Trabajador Social, entre otros. En total hubo 83 participantes.
El significado del encuentro creo que lo sintetiza maravillosamente Samya Ramos
(quien era en ese momento Presidenta de CFESS) “Luchamos para que la FITS represente un
Trabajo Social en el cual todos tengamos cabida. Estamos aquí para elaborar una propuesta de
definición en común, como fruto del proceso histórico que viene siendo construido por los
trabajadores sociales de Brasil y de América Latina a lo largo de las últimas décadas”. Como
resultado del arduo debate llevado a cabo por los presentes en esos dos días de trabajo,
finalmente logramos consensuar la siguiente definición: “El Trabajo Social / Servicio Social es
una profesión que se inserta en el ámbito de las relaciones entre los sujetos y entre éstos y el
Estado en los distintos contextos sociohistóricos de actuación profesional. Desarrolla una praxis
social y un conjunto de acciones de tipo socioeducativo, que inciden en la reproducción material
y social de la vida con una perspectiva de transformación social comprometida con la
democracia y el enfrentamiento de las desigualdades sociales, fortalecimiento de la autonomía,
la participación y el ejercicio de la ciudadanía, en la defensa y conquista de los derechos
humanos y de la justicia social”.
Esta definición era una propuesta de definición mundial de Trabajo Social pensada
desde América Latina y El Caribe, que fue llevada a la Asamblea Mundial de FITS realizada en
Estocolmo, Suecia, el 7 y 8 de Julio de 2012. El problema era que en esta Asamblea se plantean
cuatro alternativas diferentes de propuestas: a) dejar la definición vigente sin modificación; b)
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propuesta de definición de la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social; c)
propuesta elaborada por América Latina y El Caribe y d) propuesta de la Federación
Internacional de Trabajadores Sociales. Al no llegarse a un acuerdo, se decide continuar con el
debate y postergar la aprobación hasta la Asamblea Mundial de FITS llevada a cabo en
Melbourne, Australia, el 6 y 7 de Julio de 2014, donde finalmente se aprueba la Definición
Mundial de Trabajo Social, que está vigente. Si bien nuestra propuesta no fue aprobada como
tal, en los comentarios de la Definición (que los pueden leer en el sitio web de nuestra
Federación), se observa una fuerte influencia del pensamiento social latinoamericano que hace
que haya valido la pena los años de discusión y reflexión sobre una definición mundial de
Trabajo Social que fuera pluralista, inclusiva y representativa de las diversas formas y
concepciones de trabajo social y de las diversas realidades históricas de cada país.
Problematizar y acordar una nueva definición no era para nosotros/as un problema de lógica
formal sino un problema de sentido y significados político-ideológicos de la profesión.
En segundo lugar, en esa misma Asamblea, así como la discusión por la definición
mundial de Trabajo Social, se generó una fuerte disputa de sentido en el ámbito de la FITS y el
resto de organizaciones internacionales y nacionales de Trabajo Social, la incorporación del
Colegio de Profesionales de Trabajo Social de Puerto Rico (CPTSPR) como miembro pleno de
FITS fue un hecho que expresó muy claramente la disputa de poder en estos ámbitos y muy
especialmente en relación a la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales de los Estados
Unidos de América. Ésta última rechazó históricamente la incorporación de Puerto Rico,
argumentando que al ser este país un “Estado Libre Asociado” a Estados Unidos, los
trabajadores/as sociales de Puerto Rico, ya estaban representados por ellos. Se produjo un
profundo y largo debate donde los miembros de nuestra región rechazamos el contenido
colonialista e imperialista de la posición asumida por la Presidenta de la Asociación Nacional
de Trabajadores Sociales de los Estados Unidos de América, argumentando que era inadmisible
viniendo de una trabajadora social. Era evidente que se anteponía la ideología imperialista a los
principios democráticos y de reconocimiento de la autonomía de los pueblos sostenidos por el
Trabajo Social como profesión. Luego de horas de debates y cuartos intermedios, finalmente
fuimos a votación y logramos que la mayoría de los países presentes en la Asamblea nos
apoyaran para la incorporación del Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico
sea un miembro pleno de la FITS. Ganamos la votación e hicimos historia. Sin dudas fue un
hecho que desestabilizó la estructura de poder construida en la FITS y que desafió al
colonialismo, al imperialismo y al statu quo construido y consolidado en el devenir histórico de
la FITS.
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En tercer lugar, tal como mencionan ustedes, en el marco de esa Asamblea, se posibilitó
un encuentro y un diálogo muy fructífero entre los Trabajadores Sociales de la Región de
América Latina (ALC) y el Caribe y los Trabajadores Sociales Europeos que sostienen y luchan
por un Trabajo Social Radical. Es decir, un Trabajo Social Crítico que aborde los grandes
dispositivos de poder que configuran el orden social vigente desde un pensamiento crítico y un
posicionamiento ético-político ante los problemas estructurales y las profundas desigualdades
sociales que estamos padeciendo como humanidad. En ese encuentro se tejieron lazos muy
fuertes ya que nos sentimos todos/as identificados/as con la necesidad de seguir fortaleciendo
un Trabajo Social Crítico a nivel mundial que se contraponga a otras miradas más
conservadoras, tecnocráticas, psicologistas y despolitizadas de la profesión. A partir de este
encuentro comenzamos a tramar proyectos colaborativos y participación en las actividades que
ambos grupos organizamos, con el fin de que el Trabajo Social Crítico tenga mayor influencia
e incidencia en las políticas implementadas por la FITS. Por último, en relación a esto, quiero
destacar que fue la primera Asamblea Mundial que participaba y que los debates dados por la
Región dados en ese marco, generaron el respeto de los/as Trabajadores Sociales presentes (de
las otras regiones), y me atrevo a decir que fue el acontecimiento que generó las condiciones
históricas para que una Trabajadora Social de América Latina y El Caribe, años más tarde llegue
a ocupar el lugar más importante de la organización, como es la Presidencia.
Por supuesto hay otros dos eventos que quiero destacar. La Asamblea Mundial llevada
a cabo en Dublín en 2018 en donde por primera vez en la historia de FITS la Región de ALC,
llega a través de mi persona, a la Presidencia Mundial, duplicándole en votos a la colega de
Rusia, quien también postulaba para el mismo cargo. También en esa Asamblea logramos que
se apruebe la creación de la Comisión de Educación de la FITS cuyo coordinador global es
Vasilios Ioakimidis, uno de los colegas de máxima referencia del Trabajo Social Radical
Europeo, y la Comisión Indígena, conformada por Trabajadores/as Sociales Indígenas de las
cinco regiones que conforman la FITS. Esto lo enmarco en el proceso de politización y
descolonización del Trabajo Social que nos propusimos desde la Región ALC como parte de
nuestro proyecto ético-político.
Por último, quiero destacar que la Asamblea Mundial y la Conferencia Mundial de
Trabajo Social que organizó la FITS en el 2020. En estos dos eventos, también pudimos generar
las condiciones históricas para la democratización de estos espacios. En este sentido, tomamos
la decisión política que la última Conferencia Mundial de Trabajo Social realizada en el mes de
julio del año 2020 de manera virtual (producto de la pandemia COVID-19) sea no arancelada.
Históricamente, en las Conferencias anteriores, el pago de la inscripción era privativo para unos
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pocos, y estos se reflejó en la participación. En efecto, la cantidad promedio de asistentes
presenciales era de 2.500 a 3.000 trabajadores/as sociales, mientras que en esta última
Conferencia hubieron más de 20.000 participantes de todo el mundo que pudieron acceder a
todas las actividades (conferencias, paneles, ponencias, posters, presentación de libros) y al
material puesto a disposición.
CBM - ¿Como definirías los principios éticos que guían a los trabajadores sociales en
el mundo, amparados en la declaración global de principios éticos del Trabajo Social?
SM - Considero que los principios éticos que guían a los trabajadores sociales del
mundo son indispensables para el ejercicio profesional. La ética para el Trabajo Social, es
constitutiva de la profesión, no solamente como un conjunto de preceptos moralizantes
vinculados al “deber ser” de la profesión, sino fundamentalmente relacionadas con principios
que conllevan valores vinculados a la defensa irrestricta y reivindicación de los Derechos
Humanos como ejes orientados de nuestras intervenciones sociales y la formación profesional.
Aquí es importante aclarar que cuando hablo de Derechos Humanos, hay al menos dos
maneras o claves de lecturas para entender la cuestión de los derechos: una en clave liberal y
otra en clave popular. La primera tiene que ver con el surgimiento de este enfoque en el marco
de la Organización de las Naciones Unidas y se vincula a una mirada más universalista ligada
a normas y protocolos de actuación gubernamental. La segunda vinculada a las luchas populares
y conquistas históricas producto de las mismas.
Mi mirada se ubica en esta segunda clave de lectura y da cuenta de que las luchas y
disputas de sentido en relación a la profesión y los Derechos Humanos no se dieron por fuera
de las luchas populares, no solo en el marco de las dictaduras cívico-militares que se dieron en
nuestra Región, sino también en las luchas que llevamos a diario para enfrentar las
desbastadoras consecuencias del orden social capitalista-patriarcal-colonial que estamos
padeciendo. En este sentido, considero que a los principios éticos globales, hay que
resignificarlos y cargarlos de contenidos según nuestro propio devenir histórico y nuestras
propias luchas y aspiraciones como colectivo profesional, de lo contrario estos principios
quedarán en letra muerta o abstracciones vaciadas de sentido.
CBM - ¿Cuál es la importancia de la FITS en la coyuntura actual?
SM - Creo que la importancia de la FITS radica en la posición estratégica que tiene a
nivel global. Es una organización que nuclea a más de 4.000.000 de Trabajadores Sociales de
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todo el mundo, con mucha trayectoria y un acervo de conocimientos construidos a lo largo de
su historia que son muy importantes para dar muchas de las batallas que estamos dando y otras
que tenemos por delante. La FITS a partir del proceso de politización que ha tenido en estos
últimos años se ha posicionado críticamente en muchos temas regionales y mundiales. También
hemos aprendido la fuerza de lo colectivo y nos hemos asociado a muchas otras organizaciones
globales del campo de la salud y hemos elaborado un documento que presentamos en la
Asamblea de la Organización Mundial de la Salud exigiendo la justa distribución de las vacunas
en todos los continentes y la gratuidad de las mismas. Tenemos representantes en distintos
organismos mundiales ONU, OIT, UNICEF, etc., y nos reunimos con muchos líderes y
funcionarios de estos organismos en donde llevamos el posicionamiento de los trabajadores
sociales de los temas de agenda internacional. Pero a su vez tenemos nuestra propia Agenda
Global en donde estamos discutiendo precisamente los temas de la coyuntura actual, que nos
permitan tener una mirada crítica de la realidad, construir argumentos sólidos y generar
herramientas para la lucha y la transformación social.
La FITS, además tiene una tarea muy importante en cuanto a la defensa de las
condiciones laborales de los/as Trabajadores/as Sociales, el acompañamiento de los colegas en
las luchas que cada colectivo está llevando a cabo a nivel nacional. Hemos estado muy presente
en estas luchas. No es lo mismo llevas acciones en soledad a nivel nacional, que estar
acompañados, y saber que una organización de este tipo está luchando codo a codo y que
respalda los reclamos legítimos de los colegas. Además, es un espacio muy importante de
aprendizaje colectivo y muchas experiencias han sido de inspiración para muchas
organizaciones miembros. Esto los expresan y destacan constantemente los representantes de
las organizaciones profesionales, como un aspecto muy valioso y positivo por parte de la FITS.
Por último, para no extenderme mucho, como toda organización profesional la FITS es un
espacio estratégico de resistencia y lucha, de democratización y legitimación de la profesión,
de formación a los nuevos cuadros, de acción política, entre otros aspectos.
CBM - Vos sos la primera latinoamericana a ocupar este espacio. ¿Como fue la
construcción que permitió que una mujer de América Latina pudiera estar en el cargo más
importante de la FITS?
SM - Así es, tengo el orgullo, el honor y también la enorme responsabilidad que implica
ser la primera Trabajadora Social de la Región ALC que llega a la Presidencia Mundial de la
FITS. Pero, eso no fue por azar, ni meramente producto de atributos personales, sino que fue el
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resultado de un largo proceso de luchas y consolidación de un proyecto ético-político de nuestra
Región. En este sentido, quiero destacar que desde mediados de la década de 1990, las
Organizaciones Profesionales de Trabajo Social de los países de América Latina y El Caribe
han llevado a cabo en la región un acelerado proceso de organización y constitución como
sujetos políticos y actores gremiales, mediante acciones y construcción de agendas colectivas
que implicaron una fuerte construcción de poder, visibilización y presencia de la Región en el
Trabajo Social Internacional. Es importante retrotraernos a la historia. En el marco de la
profundización del Neoliberalismo en nuestra Región y a partir de la Creación del Mercosur, a
principios de 1995, el Comité Mercosur de Organizaciones Profesionales se reúne en
Montevideo y fija como lineamiento que cada profesión estableciera contactos y construyera
lazos con sus pares de los otros países.
En el caso del Trabajo Social, los representantes de Argentina, Brasil y Uruguay deciden
la creación del Comité Mercosur de Organizaciones Profesionales de Trabajo Social/Servicio
Social, firmándose primeramente un Protocolo de Intención en noviembre de 1995. En marzo
de 1996 se firma el Acta Fundacional e integran inicialmente la organización la Federación
Argentina de Asociaciones Profesionales de Servicio Social (FAAPSS), el Conselho Federal do
Serviço Social do Brasil (CFESS) y la Asociación de Asistentes Sociales de Uruguay
(ADASU). Luego se incorporan, en 1998, la Asociación de Profesionales de Servicio Social o
Trabajo Social del Paraguay (APSSTS) y, en el 2006, el Colegio de Trabajadores Sociales de
Chile. Desde sus comienzos, este Comité se constituyó en un espacio de discusión, disputas de
sentido, construcción colectiva de poder, intercambio de experiencias profesionales, difusión
de las realidades nacionales, denuncias de casos de vulneración de derechos, transformándose
de hecho en un referente clave del Trabajo Social Latinoamericano y en un legítimo interlocutor
del Trabajo Social Internacional. El resultado más importante que ha producido este espacio de
construcción colectiva es la aprobación en el año 2000 de los Principios Éticos y Políticos para
las Organizaciones de Trabajo Social/Servicio Social del Mercosur. Los temas instalados en la
agenda del Comité Mercosur fueron varios y muy importantes, a lo largo de sus 17 años de
trayectoria como espacio de construcción colectiva. Se pueden condensar estos temas en dos
grupos: a) aquellos relacionados con el colectivo profesional y b) aquellos que se orientan hacia
el conjunto de la sociedad. Asimismo, este Comité fue el antecedente que dio origen al Comité
Latinoamericano y Caribeño de Organizaciones Profesionales de Trabajo Social (COLACATS).
La creación de esta nueva organización fue un acontecimiento sumamente importante
para el colectivo profesional de Trabajo Social latinoamericano y caribeño. Fue producto de un
proceso de discusión sobre el sentido del Comité Mercosur en un contexto que había cambiado
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profundamente con la instalación de gobiernos latinoamericanos progresistas y la creación de
la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), una organización más amplia que el
Mercosur y de naturaleza política y no económica como fue el origen del Mercosur en la década
de 1990. La firma del Acta Fundacional se concretó el 29 de mayo de 2013 en la ciudad de
Montevideo (Uruguay), en oportunidad de llevarse a cabo el III Encuentro de la Región
América Latina y El Caribe de la FITS. Firman el acta los/las representantes de 12 países
presentes. De esta manera, se inicia un trabajo conjunto entre la Federación Internacional de
Trabajadores Sociales (FITS) Región América Latina y el Caribe (ALC) y COLACATS, que
fortalece aún más la voz de nuestra profesión en el concierto de voces internacionales de
Trabajo Social, fundamentalmente en el ámbito de la Federación Internacional de Trabajadores
Sociales. Una de las acciones más destacables son los pronunciamientos del Trabajo Social de
la Región ALC, que visibilizan las consecuencias de las dictaduras militares vividas en la región
y sus implicaciones en los Derechos Humanos. Se denuncian las estrategias adoptadas por los
gobiernos para invisibilizar la violencia estructural y sus manifestaciones en el marco de la
ideología neoliberal dominante en la región; se rechazan las prácticas colonizadoras de Estados
Unidos hacia la Región ALC; se reivindica el derecho a la auto-determinación de los pueblos y
se ratifica el posicionamiento ético-político del Trabajo Social como profesión orientada hacia
las poblaciones vulnerables, los trabajadores y los Derechos Humanos, rechazando las formas
individualistas, a-políticas y a-históricas de ejercer la profesión. Asimismo, se destaca la
importancia de la articulación entre las unidades académicas y las organizaciones de Trabajo
Social, como estrategia de fortalecimiento del colectivo profesional; se rechaza la
mercantilización y privatización de servicios sociales como educación, salud, alimentación y
vivienda, alertando sobre la pérdida de la legitimidad de lo público para justificar la venta de
derechos sociales como mercancías en el modelo neoliberal; se denuncia la precarización de las
condiciones de trabajo mediante la flexibilización, los bajos salarios bajos, la eliminación de
derechos, la tercerización de servicios, la asignación de funciones relacionadas con el Trabajo
Social a personas no capacitadas, entre otros temas. Fue precisamente este trabajo sistemático,
colaborativo, articulado y comprometido de nuestras organizaciones profesionales durante más
de 25 años, además de los acontecimientos que mencione anteriormente (contado de manera
muy sintética), lo que ha permitido la construcción de poder a partir de un proyecto ético-
político que se ha ido consolidando en su devenir histórico, generando las condiciones históricas
para que la Región ALC se constituya en un fuerte actor-político en la FITS y, de esta manera,
logar en el 2018 llegar a la máxima posición, de esta organización, como lo es la Presidencia
Mundial.
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CBM - ¿Cuáles son los desafíos que nuestra profesión va a tener que enfrentar en un
contexto tan desfavorable a nivel internacional?
SM - Ya sabemos que nadie se salva solo, y en este sentido creo que uno de los grandes
desafíos que tenemos como profesión es generar estrategias colectivas y crear las condiciones
para la construcción de poder popular. La única manera de afrontar este sistema depredador y
enfrentar colectivamente las profundas desigualdades sociales que impactan y padecen millones
de seres humanos, es hacerlo de manera articulada con todos los movimientos populares,
organizaciones sociales, organizaciones profesionales y académicas, sindicatos, etc.
La historia nos enseña que las conquistas sociales siempre han sido productos de luchas
colectivas, no de acciones individuales. Ante la profundización de las desigualdades sociales,
que afecta no sólo a la democracia, la paz y la dignidad humana, sino a la vida misma, hoy
observamos a muchos pueblos movilizados, un ejemplo muy cercano es lo que ha sucedido el
Chile con la denominada “Revuelta” que ha generado cambios profundos en la sociedad
chilena, como lograr la Convención Constituyente integrada por pueblos originarios,
trabajadores/as y con paridad de género, que está debatiendo una nueva Constitución
democrática y pluriversa. Esta Revuelta a despertado la conciencia crítica de un pueblo que
estaba adormecido, resignado e inmóvil y generó las condiciones históricas para que un
presidente de izquierda ganara las elecciones, luego de décadas de dictadura y Neoliberalismo.
Esto nos indica la importancia de ocupar las calles para defender nuestros derechos y exigir
transformaciones estructurales. La importancia de la construcción de poder popular, porque
ninguna revolución se puede sostener sin un pueblo que sea consciente de sus derechos y
protagonista de su destino. En este sentido, el gran desafío es poder descolonizar las
subjetividades construidas desde y para la reproducción del Capitalismo, el Patriarcado, el
Neocolonialismo, Neoconservadurismo y el Neoliberalismo, entendido no solamente como un
proyecto económico, sino fundamentalmente un proyecto filosófico.
Ya lo decía José Saramago “la alternativa al Neoliberalismo se llama conciencia”.
Cuando hablo de conciencia no me refiero a la “conciencia” a la que se refiere el psicoanálisis,
sino a la conciencia histórica, conciencia de clase, conciencia feminista, conciencia de que
somos indoafroamericanos/as. En Trabajo Social, necesitamos formar intelectuales
comprometidos con nuestro tiempo y nuestra realidad histórica. No solamente profesionales,
técnicos con habilidades y competencias metodológicas, sino fundamentalmente intelectuales
con una fuerte formación teórica-epistemológica que interpelen, desnaturalicen las ficciones
creadas para sostener el orden social vigente: el individualismo-la competencia-la meritocracia-
Entrevista com Silvana Martinez
Revista Libertas, Juiz de Fora, v.22, n.1, p. 289-301, jan. / jun. 2022 ISSN 1980-8518
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la naturalización de las desigualades sociales. Intelectuales con clara formación política. Porque
desde la política y el poder se construye y reproduce el orden social. Intelectuales con una fuerte
formación en historia, para que puedan comprender los procesos históricos y develar los
entramados, intereses, disputas presentes en procesos de larga duración que fueron
configurando el actual patrón de poder mundial. Porque, además, si no conocemos la historia,
estamos condenados/as a repetirla. Necesitamos recuperar la memoria larga de los pueblos,
porque sin memoria y sin historia nos transformamos en zombis, precisamente lo que buscan
los grupos hegemónicos de poder a través de la colonización de la subjetividad es quitarnos la
historia y la memoria, entonces perdemos la capacidad de reflexión crítica y por tanto nos dejan
sin capacidad de acción e intervención política. Nos dice el Foro Social Mundial que “otro
mundo es posible” y creo yo profundamente en eso, sino no podría ser Trabajadora Social ni
ejercer mi profesión. En este sentido, siempre digo que, si no te mueve la convicción al menos
que te mueva la indignación, pero nunca la resignación. Necesitamos Trabajadores/as Sociales
indignados, con mucha formación y con capacidad de lucha.
CBM - ¿Qué mensaje les dejarías a los jóvenes que están entrando en las carreras de
Trabajo Social en Brasil y en el mundo?
SM - En principio decirles que hay elegido la profesión más maravillosa que existe, por
la enorme potencialidad de transformación que tiene, para el Trabajo Social, como lo decía el
Che Guevara “la única lucha que se pierde es la que se abandona” y nosotros jamás hemos
claudicado ni abandonado nuestros sueños y esperanza de construir un “mundo donde quepan
muchos mundos”. El Trabajo Social latinoamericano y caribeño hoy se encuentra fortalecido y
en acelerado proceso de construcción, enriquecido con nuevas ideas y con una multiplicidad de
nuevos aportes, reivindicación de los saberes y la memoria larga de nuestros pueblos originarios
y reinvención cotidiana de la capacidad de lucha por la liberación y la emancipación y
resistencia ante el capitalismo, el patriarcado, la dominación y la colonialidad imperialista. Los
invito a sumarse a esta lucha colectiva. El Trabajo Social de Brasil, tiene una larga historia de
lucha y es inspiración para muchos países del mundo y me siento muy honrada de tener a
grandes colegas del Trabajo Social de Brasil como compañeros/as de luchas. Luchas que hay
que sostenerlas y profundizarlas. En este sentido los jóvenes son indispensables ya que serán
quienes tomen la posta en este camino de la construcción colectiva, donde se entrelazan las
generaciones, las experiencias, los saberes, los derroteros, los fracasos, pero también las
conquistas. Por último, decirles que jamás pierdan la alegría, porque como decía un intelectual
La Federación Internacional de Trabajadores Sociales (FITS) e los trabajadores sociales en el mundo
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argentino “nos quieren tristes para que nos sintamos derrotados. Nada grande se puede hacer
sin alegría”.
Para cerrar quisiera agradecerles a ustedes nuevamente por haberme convocado para
esta maravillosa entrevista en la que intenté desplegar, a partir de sus preguntas, parte del
enorme trabajo colectivo realizado que contiene pasado-presente y futuro de nuestra profesión.
